martes, 21 de julio de 2009

Endings

Necesité un espacio para descargar el dolor que siento, la angustía y la tristeza de mi alma y mi corazón. Necesito un espacio en el cuál poder escribir lo que no puedo decirle a nadie que no tengo. No tengo a nadie con quién compartir esto y que me abrace y me diga que deje de llorar *. Sólo me resguardo en mis pensamientos y en mi lucha constante con el no pensar y las lagrimas. No quiero seguir así, pero no puedo evitarlo. Me destruye el alma todo esto.
A veces imaginaba cuando llegaría este momento y me construía una barrera en la que pudiera auto protegerme del dolor, de las palabras ajenas y no lastimarme. Lo imaginé muchas veces y consideré que no me iba a lastimar y que no me iba a hacer sufrir tanto. Pero todo eso que imaginé no se asemeja en nada a esto. Todas las imágenes y películas mentales e imaginarias no se comparan con la realidad de la que, lamentablemente, no supe escapar antes.
Me dijeron que es obvio que me pase lo que siento y que estos sentimientos me ocurran y no me dejen vivir, que con el tiempo se va a sanar el dolor y el resentimiento. PEro cómo hago para que ese tiempo llegue lo más pronto posible, cómo hago para superar esto ya. No soy tan fuerte como para soportarlo y me va a terminar de derrotar. Lo sé.
No puedo escribir más.

*Noe estuvo, me aconsejó y me acompañó a la distancia. Te super agradezco por todo y por la buena onda. Y por entenderme tanto. Sos la única a la que pude confiar esto. Me da pena no haber podido ablarlo con nadie más. Que nadie haya estado cuando los necesitaba. Sólo un abrazo, una mirada a los ojos o unas palabras de aliento. Pero no.

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