Prima, verás...

Cada vez más, con el paso del tiempo, menos comprendo el significado de lo que para muchos significa la primavera. No entiendo por qué le imprimen ese sentido de felicidad, color, amor y muchas cosas más.
Si, lo sé. Las plantitas, los arbolitos en flor y los colores de la naturaleza se intensifican y se multiplican en el cielo. El blanco puro de las nubes es permanente, el amarillo radiante del sol que quema la piel.
Pero, más allá de esto, qué significa la primavera.
Nadie me lo podrá explicar porque cualquier explicación me parecerá irracional.
Sin razón como la razón de esos jóvenes que salen y festejan el día del estudiante y de la primavera e invaden la ciudad mientras quienes trabajan o, realmente, estudian deben mirarlos con esa utópica felicidad de la vagancia.
Por lo tanto, no digo nada.
Por lo tanto, no comprenderé el sentido o significado del color de la naturaleza hecho un hecho cultural comercializable.

Fin de semana enfermo

Si, asi fue. El miércoles, que no es fin de semana, Peque, mi perra más viejita, me mordió la cara cuando la fui a saludar apenas llegada de la facultad. Me lastimó bastante, pero nada con demasiada importancia.
Jueves, me despierto adolorida. No le doy importancia, porque considero que puede ser respuesta de mi cuerpo a mi vagancia y mi falta de descanso, como es habitual.
Viernes, me despierto relativamente bien. Me preparé para salir poruqe me tenía que encontrar con mis compañero para editar y... No, no pude. Me descompuse, se me revolvió todo en la cabeza, perdí fuerzas y me aumentó el dolor que sentía en todo el cuerpo, especialmente en la cintura.
Sábado, entrega de entrevistas para gráfica. No pude dormir del dolor que sentía. Le pido unas aspirinas a mi mamás.Me levanto tarde porque de una sabía que no iba a poder ir a la clase, le mando mis trabajos a mi profesor. Me voy a acostar a las 13 y, cuando me despierto, alrededor de ls 17 tengo 38.6 de temperatura, escalofrios y dolores en todo el cuerpo, pero peores. Me moría de frio mientras que mi hermana lo hacía por el calor. Le pido que me pase más abrigo, no podía moverme ya del peso de los cobertores sobre mi.
A las 18.30 me vuelvo a despertar. 38.8° y transpiración de la que no me habpia percatado. "Má, comprame ibuprofeno" a lo que me contesta "Pero qué mierda te pasa que tomas aspirinas y ahora me mandas a comprarte esto!!". "No aguanto más el dolor que tengo en el cuerpo", le digo. "Te duele el cuerpo por estar todo el dia acostada, sin hacer nada", me contesta. Es así. Desconsiderada y sin memoria. No me queda otra que no escucharla o llorar. Opté por no escucharla.
Cuando me trae las pastillas, tomo una, me duermo y cuando me despierto ya había bajado la fiebre a 38.3, que más que nada me asustó y preocupó porque nunca tengo fiebre, es muy raro en mi. La última vez que recuerdo haber tenido fiebre fue el año pasado cuando estuve con anginas, pero no con todos los dolores con los que vino esta.
Me levanté, tomé sopa.
Me acosté sin poder terminar de ver Peter Pan.
El domingo fue igual, sumado a un muy feo dolor de cabeza que iba y venía, pero ya sin fiebre.
Lunes, mejor pero con la cabeza partida en dos por el dolor. No fuí a la facu y me voy a lamentar por eso todo el resto del cuatrimestre porque no sé cuándo es el parcial y no tengo a nadie a quien preguntarle ni nadie que me informe nada.
Hoy. Siguen las nauseas que empezaron el jueves.